Hat days Barcelona

Aún estoy aterrizando de los hat days de Barcelona, vengo cargada de emociones, aprendizajes, compañeros, amigos y mucho mucho mucho que asimilar…

  

 

Pude optar a ir a este viaje gracias a haber ganado la bolsa Eloy Gesto de Artesanía de Galicia, que es una beca de formación durante un año. Los Hat days de Barcelona, organizados por la Asociación española de sombrerería a la que pertenezco, eran una oportunidad única para ello, ya que allí se reunían sombrereros de todo el mundo (España, Holanda, Alemania, Reino Unido, Rusia, Yugoslavia, Francia, Australia…) dando formaciones y pudiendo convivir con ellos durante ese tiempo.

 

Yo estuve de jueves a lunes y exprimí los días al máximo, aprendiendo y absorbiendo todo lo posible de todos los maestros y compañeros. Llegué directa al mercado de materiales, un mercado de materiales increíbles que se alojaba en un espacio precioso dedicado a las antigüedades en el centro de Barcelona, muy cerquita del mercado de la Boquería.

Allí estaban proveedores de materiales nacionales como Masario con sus pajas y troqueles, extrajeros como Plooij que vinieron desde Alemania cargados con materiales para perder el sentido: fieltros, fibras, cintas, parasisales, sinamais…

Carina de Feutrex, que trabaja exclusivamente aprestos para todo tipo de materiales y nos explicó con todo lujo de detalles los usos de cada uno de ellos haciendo muestras en diferentes tejidos.

Estaba Elly Stemerdink con sus revistas The Hat magazine y Hatlines, referentes en el sector a nivel mundial, además de ser también una gran sombrerera con la que tuve el gusto de hablar sobre sombrerería durante los días que estuve.

Además estaba con ella la gran Marianne Jongkind, una gran maestra de la sombrerería, que me firmó su libro, hablamos del oficio y nos dió una masterclass de cosido de paja a máquina. Un placer compartir con ella estos días y poder aprender de ella, de su manera de hacer las cosas, es muy generosa con sus explicaciones y siempre se aprende hablando con los maestros. Tuve la oreja bien abierta durante todos los días, en cada conversación se aprendían cosas sobre el oficio, en cada esquina se charlaba de sombreros, técnicas… un lujo.

                       

 

La parada del mercado más especial era la de Nina Pawlowsky: llena de materiales vintage, muchos de ellos que ya no existen, una maravilla para los sombrereros: tissues, payasones, crines, todo tipo de pajas y vivos, rafias… una caja viene de camino a Galicia cargada de sus tesoros.

También el sombrerero Santi Lanbroa tenía una pequeña parada con plumas maravillosas dignas de coleccionista.

Y Bea de Las Pepitas que trajo cajas y maletas llenas de cintas, cubrecosturas, pasamanerías antiguas y preciosas.

              

Pena no poder comprar de todo, tuve que practicar mucho la contención, la compra meditada y estudiar mucho lo que más me convenía ahora mismo. Aunque ahora con el contacto de todos ya me será más fácil conseguir materiales de calidad para mis siguientes trabajos cuando los necesite.

 

El viernes pasé el día completo en en Museo del diseño, aunque de camino pude pararme a ver el mercado de Les Encants, un lugar digno de visitar para los amantes de los mercados como yo. Era día de desembalaje así que estaba repleto de tesoros y de allí (tras unos regateos) me traje un antiguo y pequeño martillo de latón que podría haber sido con el que un médico miraba los reflejos de sus pacientes. Ahora será para clavetear mis hormas y sustituir a uno feo de ferretería.

 

El resto del día fue aprendiendo fieltro con Santi Lanbroa, desde cómo fieltrar en plano hasta cómo conseguir preciosas flores que parecen tejidas sólo con nuestras manos. Me maravilló el proceso y cómo de la lana en bruto podemos conseguir flores tan bonitas combinando colores y dándole mucho mimo para conseguir el entramado de tejido final. El cómo añadir tonos para crear volúmenes, la mezcla con seda y otros materiales para dar texturas… fué muy generoso y salimos encantadas todo el grupo.

         

 

El sábado de nuevo en el Museo de Diseño fue integro para otro curso, en este caso el de Denise Innes-Spencer, la fundadora y propietaria de The British school of Millinery y fundadora de la asociación británica de sombrerería. Y por casualidades de la vida, tuve la suerte de tenerla sólo para mí, así que pude tener una masterclass en crines y alambrados, aprender técnicas nuevas para mí, las cuales me entusiasmaron por sus resultados etéreos, ligeros y modernos. Además charlamos mucho durante tantas horas y fue muy interesante que me contara cómo se vive la sombrerería en Inglaterra, cómo es allí la formación, las relación entre sombrereros y las clases que existen… todo un lujo. Tengo que dar las gracias a Cristina, Vlad y Nina que me echaron una mano con el inglés cuando me perdía alguna cosa por la velocidad de las conversaciones.

     

 

Y el domingo llegó la traca final:

El paseo con sombrero

 

A medida que nos acercábamos al punto de encuentro cada vez veíamos más gente con sombrero, se iba llenando la calle y llegamos a una Rambla de Cataluña repleta de personas todas con sombrero, de todas las edades, todo tipo de sombreros, caseros, profesionales, looks completos… ¡increíble!

Fue un disfrute, casi no saqué fotos, pero estaba alucinada viendo cada persona que pasaba, era abrumador y un sueño para nosotros los sombrereros. La bajada de la rambla con miles de personas, un ambiente alegre y mágico, ir descubriendo cada uno de ellos… ¡un espectáculo!

Os dejo un video resumen de algunos de ellos y os animo a que os lo apuntéis en la agenda e ir a vivirlo, yo intentaré no perdérmelo el año que viene

 

 

Julia

 

No hay comentarios

Deja un comentario